Nos encontramos ante una situación límite en lo económico y los socios querían cerrar ya que la asistencia de clientela era cada vez menor. Una dificultad añadida era la enorme deuda que arrastraban los socios y que el lugar dónde se ubica (Mercado de Torrijos, barrio de Salamanca) está en clara decadencia.
La parte positiva era que los dos socios hacen una comida autóctona de México pero no sabían publicitarla correctamente y no interactuaban con los clientes de modo fluido.
Con respecto a la carta, era larga y compleja de ejecutar en cocina lo que hacía que el servicio era lento y los clientes sobre todo entre semana no podían esperar una hora en terminar la comida.
Si CJP no era capaz de cambiar la situación en semanas, los socios iban a cerrar el local y perderían los 30.000€ invertidos.
Lo primero que hicimos fue adecuar la carta, acortándola y sólo teniendo los mejores platos pero siempre bajo la premisa de que en cinco minutos estuvieran servidos en mesa. En el mismo instante hicimos una campaña en redes sociales, hicimos la página web (www.restaurantequetzal.es) y llegamos a un convenio con EL TENEDOR para que enviasen clientes. Inmediatamente después contratamos flyers e inundamos el barrio de publicidad y comenzamos también a hacer delivering tras acuerdo firmado con UBEREATS.
Desde nuestra contratación, el restaurante ha ganado dinero (nunca antes lo habían conseguido) y en la actualidad sigue luchando y ha superado incluso el estado de alarma y el confinamiento que hemos padecido durante este 2020.